En un partido que se suponía parejo y estudiado en sus primeros momentos, las especulaciones quedaron de lado porque Sudáfrica pegó primero y abrió el marcador a los seis minutos.
Sorprendió Du Preez buscando por el lado mas corto de la cancha a Pietersen quien escapó por el lateral y rompió la defensa inglesa. Pese a que el jugador fue alcanzado, Juan Smith llegó en el apoyo y marcó el primer try para su equipo, coronando una gran jugada colectiva.
A los 20 minutos Sudáfrica pudo estirar la diferencia cuando Fourie se cortó dentro de la zona de peligro inglesa, pero a pocos metros del ingoal fue tackleado y en el segundo movimiento cometió un knock-on y desperdició la oportunidad de un nuevo try.
Las ganas no alcanzaron
Por el lado de Inglaterra hubo mucho tackle pero pocas ideas en el ataque que justificaron que los de la rosa no hayan conseguido puntos en la primera etapa. Sólo el fullback Jason Robinson trató de contagiar con sus ganas desde el fondo, pero con eso no alcanzó.
Sobre el final, tras un penal anotado por Percy Montgomery, llegó una nueva conquista de JP Pietersen para sellar una justificada ventaja de los sudafricanos de 20-0.
Dominio continuado
Las acciones en el segundo tiempo fueron más parejas ya que se repartieron la posesión de pelota y de territorio. Sin embargo Sudáfrica siguió alargando la diferencia en el marcador con los penales que logró Montgomery a los 5 y 14 minutos para poner las cosas 26-0.
Los cambios no alcanzaron
Brian Ashton buscó en el banco de suplentes la reacción de su equipo que finalmenete nunca llegó. El cambio más significativo fue el de Andy Gomarsall al que mandó a la cancha a Gomarsall, tratando de refrescar la conducción de un pack que la pasó mal en la primera parte del partido.
Fue la falta de un estratega lo que afectó a Inglaterra. Lesionados Wilkinson y Barkley, Mike Catt no funcionó como se esperaba y tampoco Farell, otro de los jugadores importantes del equipo, tuvo un buen desempeño.
Fórmula repetida
Cuando Inglaterra mostraba un tibio despertar, los Springboks volieron a dar por tierra con las intenciones de su rival. Otra vez la combinación por el lado ciego entre Du Preez y Pietersen, terminó con un nuevo try del wing.
En el final los ingleses intentaron anotar el try del honor para no quedar en cero. En tanto que los Sudáfricanos estuvieron a la espera de una oportunidad de marcar el try que les diera el bonus, que finalmente no llegó, y cerraron el marcador con un nuevo penal de su fullback para sellar el 36-0 histórico y definitivo.
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